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“Latin noir”, un documental que reaviva el debate sobre las mujeres y el nuevo policial latinoamericano

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El documental “Latin noir”, proyectado el lunes en la Biblioteca Nacional, donde el griego Andreas Apostolidis mapeó la nueva literatura policial latinoamericana a través de las voces de Claudia Piñeiro, Luis Sepúlveda, Paco Taibo II, Leonardo Padura y Santiago Roncagliolo, reavivó el debate sobre la representación de las escritoras en un género que como ningún otro, en este continente, se vuelve político, oscuro, social y, sobre todo, preocupado por la participación del Estado en el circuito del crimen.

La corrupción en México, el fracaso del socialismo en Cuba, el terrorismo en Perú, la rémora de la dictadura y la crisis económica en Argentina y exilio en Chile son algunos de los intereses que plantea el filme “Latin noir” en su recorrido, un derrotero fundado en la convicción de que leer policial latinoamericano escrito a partir de la década del 70 es el equivalente a leer historia latinoamericana, a conocer los conflictos sociales de cada época.

Sin embargo, “hay una parte de la violencia del continente latinoamericano” que se le escapa a este documental, rodado hace cerca de una década, mucho antes de los debates feministas que tomaron las calles en muchos de esos países, antes incluso de la pandemia en la que murió Sepúlveda, uno de los entrevistados, señaló Piñeiro en el auditorio Jorge Luis Borges, donde se proyectó la celebrada producción de Apostolidis, también guionista y uno de los principales escritores de novela policíaca en Grecia, ante la presencia del director de la Biblioteca, Juan Sasturain.

Piñeiro, quien en ese auditorio se encontró por primera vez con el filme dentro del cual consideró “un privilegio” haber participado, compartió con la audiencia un “reproche” que tenía consigo misma, “no haber insistido lo suficiente” en la cantidad de escritoras que representan ese movimiento literario que estaba señalando Apostolidis al momento de entrevistarla “hace casi 10 años” para esa producción, siendo ella la única escritora entre cinco autores convocados.

Liliana Escliar, María Inés Krimer, Florencia Etcheves, Dolores Reyes, Gabriela Cabezón Cámara y Paula Rodríguez en Argentina, la mexicana Cristina Rivera Garza, la peruana Karina Pacheco Medrano, la chilena Paula Ilabaca, la cubana Rebeca Murga Vicens, repasó entre esos nombres posibles.

“Hice una listita pero no fui muy vehemente. Hoy insistiríamos más sobre el tema -aseguró la autora de ‘Las viudas de los jueves’-, porque hay una parte de la violencia del continente latinoamericano que está mejor o más representada en esos textos, una violencia que recae sobre las mujeres y los grupos LGBT: en El Salvador penan con hasta 58 años de cárcel a una mujer por abortar -graficó-. Probablemente no estén reflejados en esta selección hecha hace mucho tiempo lo que representan esas violencias”, como feminicidios y travesticidios.

Sasturain, por su parte, recorrió parte de la genealogía de ese noir que luego vería la audiencia y recurrió a un viejo juego de palabras que suele hacer cuando habla de “la literatura policial escrita del Río grande para abajo”: “Ante el auge de los escritores nórdicos, siempre decimos que nos quedamos con los escritores súrdicos, con toda es literatura realista vinculada con el policial, llamada generalmente negro, que se escribe en el sur”.

“En la historia del género policial en nuestras latitudes hay dos momentos muy significativos” y en ambos “hay mucha tradición”, anticipó.

El primero fue “cuando Bioy y Borges fundan la colección ‘La muerte y la brújula’ reivindicando el policial como el lugar donde la trama no abandonaba el relato”, en una época en que “la novela contemporánea se había olvidado de relatar historias que mantuvieran atrapado al lector” y “la literatura policial era el último reducto de la racionalidad de un buen cuento”, principio bajo el cual “el emblema más popular y último fue Agatha Christie“.

El otro momento “fue 20 años después en Buenos Aires con Ricardo Piglia y la ‘Serie Negra'”, con esa colección por “primera vez se empieza a usar esa terminología”, el mismo gesto que tuvo Francia al leer la literatura norteamericana cuando la llamó noir, desde afuera, desde otro lugar de evaluación, aunque “con un signo ideológico inverso al de Borges y Bioy -indicó Sasturain-: lo que había sido leído en términos de mero entretenimiento para sectores populares pasó a ser leído bajo influencia francesa como lo que es, realismo crítico del siglo XX”.

Esa “literatura extraordinaria de testimonio social”, dijo el autor de “El último Hammett”, “influyó directamente en los primeros textos que escribimos muchos de nosotros en los 70 y 80 en México, España y Francia: esa nueva forma de escribir literatura policial se empezó a llamar literatura negra” y “en este hermoso documental queda testimoniado cómo la literatura latinoamericana ha retomado ese género y lo ha convertido en una forma de expresión crítica muy contundente”.

Una expresión que por otra parte, como señaló Piñeiro frente a la audiencia, no alcanzó a un presente de demandas “vehementes” de representación femenina en esos mapeos literarios y que con eso excluyó la parte de ese testimonio social que podrían aportar las miradas y textos de algunas de las tantas muy escritoras que hace décadas son referencia de la novela negra:

“Había, en los 70, la clara intención de una serie de escritores de crear una novela nueva policíaca latinoamericana y de cómo hacer novela policíaca en un país donde el hecho criminal fundamental de esa sociedad era el crimen de Estado”, sintetiza en el documental el mexicano Taibo II.

La juventud se había quedado diseminada en cientos de lugares, los años de cárcel, en habitaciones extrañas de países más extraños todavía, en regresos homéricos a ninguna parte, completa el off del filme que funciona como tributo a Sepúlveda, fallecido el 16 de abril de 2020 por coronavirus en España, a los 70 años, que abandonó Chile en 1977, durante la dictadura de Pinochet.

“El policial permite contar muy bien a una sociedad -resume Piñeiro al sumar su voz al filme-. No en cualquier sociedad hubiera habido 30.000 desaparecidos y niños apropiados como la Argentina. Eso hace que esa sociedad propicie que se cometan determinados crímenes” y, con ello, que surja determinado tipo de policial en su literatura.

“Héctor era mexicano y tuerto, de manera que veía la mitad de lo que veían los demás mexicanos, pero con mayor precisión focal”, escribe Paco Taibo II sobre Héctor Belascoáran Shayne, el detective independiente, -“privado no, hasta en perros hay razas”, advertía el autor en alguna entrevista- que aparece por primera vez en su novela “Días de combate”, en 1976, famoso en la ficción por entrometerse en esos casos del Distrito Federal que nadie se atreve a mirar.

De esa dificultad de mirar habla Roncagliolo en sus propios términos: “Mi vida siempre se pareció mucho más a las películas de terror, a las de asesinos en serie, a la novela negra, de modo que todo mi trabajo se ha centrado después en explorar en eso mismo, el miedo. Las cosas que nos perturban, que nos producen pánico”, dice en el documental este limeño nacido en 1975 que tiene en común con Sepúlveda haber dejado su país, y que hace muy poco, con motivo de su nuevo libro “Lejos. Historias de gente que se va”, reiteró una idea que acompaña su deriva como ciudadano europeo: “Perú no es solo un estado fallido, es una sociedad fallida”.

Periodista, cineasta y uno de los escritores latinoamericanos más leídos de Europa -además del chileno más leído de Alemania, Francia y España-, Sepúlveda lo explicó de esta forma en el testimonio dado a Apostolidis: “En México, Cuba, Argentina, Perú, Chile tomamos de la novela policíaca tradicional y agregamos algo: historia. Decidimos contar lo que el poder negaba”. Él lo hizo en libros como “Perder es cuestión de método”, “Historia de un caracol queaprendió la importancia de la lentitud” o “Un viejo que leía novelas de amor”. Lo hizo además a través del detective George Washington Caucamán, un personaje bajito y rechoncho dotado de un extraordinario sentido del olfato, el humor y la ironía. De origen mapuche, como la madre del escritor.

Es otro detective, Mario Conde, el que ayuda a trazar ese nuevo mapa de la novela policial latinoamericana, esta vez de la mano de Leonardo Padura, cubano nacido en el 55 y residente de toda la vida en la Cuba socialista: “Conde me ha servido para ver la realidad cubana”, dice a cámara el autor de “El hombre que amaba a los perros”, pero habla de un fenómeno que va mucho más allá de él, de Conde y de la propia Cuba. La novela negra latinoamericana, queda claro en el documental que “no es un fenómeno aislado” sino “un espacio narrativo ideal que permite la visión del sistema, las ciudades, la sociedad ,y sobre todo, de las raíces profundas de lo criminal”.

El evento contó con el apoyo del Ministerio de Cultura de la Nación y de las embajadas de Chile, México, Cuba y Perú.

(Fuente: Agencia de noticias Telam)

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Cine

“Wicked”, el mejor musical en años

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Por Janire Zurbano (*)

Antes de valorar “Wicked”, un apunte personal. No me suelen convencer los spin-off que tratan de redimir a un villano, esas historias de origen terribles que generan monstros. “Wicked” aborda la juventud de una antagonista, la Bruja Mala del Oeste de “El mago de Oz”, pero el suyo no es un relato sobre la herida de infancia que se infecta hasta tener que amputar cualquier resto de bondad del cuerpo. Es algo más interesante: un recordatorio de que la historia cambia según quien la cuente.

En el libro “Wicked: memorias de una bruja mala” (1995), Gregory Maguire reinterpretó “El mago de Oz” y transformó a la malvada bruja en Elphaba, una poderosa joven acosada y marginada por su color de piel verde que busca desesperadamente encajar. Stephen Schwartz puso música al viaje de la heroína y lo convirtió en un exitoso musical de Broadway que ahora resplandece en cine. 

Pese al recelo que suscita el género en gran pantalla, pese a los retrasos en la producción del filme, pese a las expectativas surgidas por la obra teatral, ya podemos decir que “Wicked” es la mejor película musical que ha llegado a la taquilla en mucho tiempo.

Abraza la musicalidad sin tregua durante las dos horas y 40 minutos de metraje (avisados están todos aquellos que detestan el musical puro), recupera el lenguaje extremadamente gesticular, expresivo y exagerado del género sobre las tablas, y se enorgullece del dramatismo exacerbado y hasta el ridículo al que se presta en cada número, desde los bailes pélvicos y perfectamente coreografiados de “Danzing Through Life” a la superficial “Popular” y la gloriosa “Defying Gravity”.

El director Jon M. Chu no solo honra el material original sino que lo eleva valiéndose de los instrumentos que le proporciona el audiovisual: busca refinamientos técnicos y juega con la cámara en un baile de planos y escenarios. Todo está dispuesto para que, en medio del tornado en tonos pastel, brillen Elphaba y Glinda, o Cynthia Erivo y Ariana Grande, pura química, talento y emoción. 

La primera recoge en su voz y su expresión facial la vulnerabilidad desgarradora y el coraje de la protagonista, mientras que la segunda, en un papel inicialmente menos agradecido, es el contrapunto cómico irresistible, tan chisposa, caprichosa y tierna. Ellas son las estrellas de la función y el resto cede gustoso el foco, aunque estén a la altura cuando es preciso, cuando Jonathan Bailey se entrega a la galantería socarrona de Fyiero o Jeff Goldblum demuestra que nació para ser el Mago.

“Wicked” tiene todo lo que puedes pedirle a un musical en cine. Tiene temas pegadizos, números que te hacen volar, ambición visual y un espectáculo que en ningún momento descuida la narrativa ni a sus personajes. El empaque es fantástico, pero el mensaje resuena en el mundo real: todos queremos ser amados, pero para eso primero tenemos que amarnos a nosotros mismos. Curiosamente, tanto el viaje de autoaceptación de Elphaba como el de muchos personajes remite a la discriminación, la xenofobia y la intolerancia tan de actualidad.

El año que viene, llegará la segunda parte con un reto mayúsculo: igualar una primera entrega redonda, que además se ha quedado con al trama más jugosa de la obra teatral, aunque será la segunda la que se solape con “El Mago de Oz”. Por lo pronto, celebremos que Chu desafió la gravedad y salió victorioso con una película musical cautivadora, emocionante y tremendamente disfrutable. Sorpresa: los musicales pueden estar entre las mejores películas del año cuando se hacen bien.

(*) Cinemanía.

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Cine

Variada oferta en la renovación de la cartelera cinematográfica

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Wicked: Parte I

Director: Jon M. Chu

Elenco: Cynthia Erivo, Ariana Grande, Michelle Yeoh, Jeff Goldblum, Jonathan Bailey, Ethan Slater, Marissa Bode, Bowen Yang, Bronwyn James y Keala Settle

Ambas se conocen como estudiantes en la Universidad de Shiz en la fantástica Tierra de Oz y forjan una amistad improbable pero profunda. Tras un encuentro con El maravilloso Mago de Oz, su amistad llega a una encrucijada y sus vidas toman caminos muy diferentes. El inquebrantable deseo de popularidad de Glinda se ve seducido por el poder, mientras que la determinación de Elphaba de permanecer fiel a sí misma y a quienes la rodean tendrá consecuencias inesperadas e impactantes en su futuro. Sus extraordinarias aventuras en Oz finalmente las verán cumplir sus destinos como Glinda la Buena y la Malvada Bruja del Oeste.

Vera y el placer de los otros

Director: Federico Actis y Romina Tamburello

Elenco: Ofelia Castillo, Inés Estévez, Luciana Grasso, Mariano Raimondi, Carlos Resta

Aprovechando que su madre trabaja en el negocio inmobiliario, una adolescente alquila por horas, de forma clandestina, un piso a otros jóvenes para que puedan tener un espacio donde practicar sexo. Lo que parece una manera fácil de ganar dinero se convierte en realidad en la vía a través de la cual la chica empieza a explorar su sexualidad.

Hereje

Director: Scott Beck, Bryan Woods

Elenco: Hugh Grant, Sophie Tatcher, Chloe East, Elle McKinnon, River Codack, Stephanie Lavigne, Carolyn Adair, Elle Young, Haylie Hansen.

Dos jóvenes misioneras se ven obligadas a demostrar su fe cuando llaman a la puerta equivocada y son recibidas por el diabólico Sr. Reed. Los tres se verán envueltos en un brutal juego del gato y el ratón durante una larga noche de tormenta.

Chocolate para tres

Director: Tomas Sánchez

Elenco: Florencia Torrente Gastón Sofritti Elena Roger Arturo Puig Beatriz Spelzini Andrea Pietra Romina Gaetani Antonio Birabent Romina Fernandes Marta Mediavilla

Julia llega a las semifinales para el rol protagónico de una comedia musical. Pero, como su abuelo quiere vender el hotel, muy querido por su padre que murió hace un año, ella siente que debe hacerse cargo y posterga su vocación profundizando sus trastornos alimenticios.

La única esperanza es que su abuela, que abandonó la empresa familiar, vuelva, se reconcilie con su abuelo y tome su lugar.

Una titánica batalla entre la culpa, el deber y sus deseos. Pero Julia conoció a Lucas. Un encuentro que modificará sus vidas. Un viaje de transformación. Julia logrará pedir ayuda como un ofrecimiento… como un acto de amor.

Stop Marking Sense

Director: Jonathan Demme

Elenco: David Byrne, Tina Weymouth, Chris Frantz, Jerry Harrison, Bernie Worrell, Alex Weir, Steve Scales, Lynn Mabry, Edna Holt.

Recientemente restaurada en 4K para coincidir con su 40 aniversario, la película de 1984 rodada por el cineasta Jonathan Demme está considerada por la crítica como la mejor película concierto de todos los tiempos. La presentación en vivo se filmó durante tres noches en el Teatro Pantages de Hollywood en diciembre de 1983 y presenta las canciones más memorables de Talking Heads.

Gaucho Gaucho

Director: Michael Dweck, Gregory Kershaw

Una celebración de los gauchos argentinos, una comunidad de vaqueros y vaqueras que viven más allá de las fronteras del mundo moderno.

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“Gladiador II”, una bocanada de aire para la taquilla argentina

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Entre el jueves 14 y el lunes 18 de noviembre de 2024 se vendieron 551.491 tickets en los cines argentinos, según cifras fiscalizadas por Ultracine. La concurrencia aumentó un 77%, respecto al fin de semana pasado; y un 47% respecto al mismo período de 2023.

Desde 2018 no se veían cifras tan altas para el fin de semana de la soberanía nacional. “Gladiador II” incrementó un 217% la convocatoria en sus primeros 5 días.

Fue un fin de semana largo de 5 días, debido al día de la soberanía nacional instaurado en 2010. El récord para este período es de 2014 cuando se vendieron 844.167 entradas. Con estos números, 2024 se convirtió en un récord de post-pandemia y la mejor cifra desde 2018. En 2023 se habían vendido 375.550 entradas, pero también había coincidido con el ballotage presidencial por lo que disminuyó la asistencia a los cines debido a la veda electoral.

“Gladiador 2” fue la gran ganadora del fin de semana despertando del letargo a una taquilla de fin de semana que no veía cifras superiores a 500.000 espectadores desde agosto de este año y con el arranque más alto desde las vacaciones de invierno. Cortó 288.858 tickets en 488 salas argentinas y vendió el 52% de las entradas totales.

“Gladiador” se había estrenado el 18 de mayo de 2000 y convocó a 91.162 personas en sus primeros 5 días y a 966.179 espectadores a lo largo de toda su carrera comercial. La secuela de Ridley Scott aumentó un 217% su convocatoria en 2024. El director ha estrenado 25 títulos en Argentina desde 1996 con un total de 6.468.278 de entradas. “Gladiador” ha sido su película más taquillera.

En el segundo puesto se ubicó “Venom: El ultimo baile” que perdió el liderazgo con 50.496 asistentes en 157 salas. Perdió un 26% de taquilla y un 46% de salas.

“Robot salvaje” subió dos puestos y se ubicó en la tercera posición con un aumento del 12% de su convocatoria a pesar de haber perdido un 20% de pantallas. La laureada animación de Dreamwoks tuvo 45.451 espectadores en 168 salas.

“El tiempo que tenemos”, drama romántico protagonizado por Florence Pugh y Andrew Garfield, bajó dos puestos con 42.134 en 133 pantallas.

“Código: Traje Rojo”, comedia de acción con Dwayne Johnson, Chris Evans y Lucy Liu, quedó en la quinta posición con 39.630 entradas en 158 salas.

La película con la mayor caída de la semana fue “Terrifier 3” que vio disminuida su taquilla un 54% con 21.031 espectadores en 122 salas. De todas maneras, ha vendido un total de 174.730 entradas desde su lanzamiento superando por 73% a “Terrifier 2”.

La última película de Woody Allen“Golpe de suerte en París”, tuvo 13.882 espectadores en 55 pantallas en el puesto 7. El prolífico director neoyorquino ha lanzado 27 títulos en Argentina desde 1996 y este ha sido uno de los menos taquilleros desde 2022 con “Rifkins festival”.

(Fuente: Ultracine – Por Carina Rodríguez)

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Propietaria/Directora: Andrea Viveca Sanz
Domicilio Legal: 135 nº 1472 Dto 2, La Plata, Provincia de Buenos Aires
Registro DNDA Nº 2022-106152549
Edición Nº